Casi a la salida del poblado de Homún se encuentra el Cenote Chel – Paak o en español el Cenote Arcoíris, para llegar a él tienes que salirte de la carretera y avanzar por un camino de terracería, justo esta cuando se acaba el camino.
Apenas está operando por lo que el espacio y las instalaciones cuentan con lo indispensable, al entrar enseguida esta la recepción en donde pagaras el acceso al lugar y te explicaran que el tiempo de visita al cenote esta reducido de 30 a 45 minutos por familia, esto es debido a la pandemia y a lo estrecho del lugar.
Posteriormente se encuentra una palapa en donde puedes sentarte a esperar tu turno de acceso y enfrente se encuentran los baños y los cambiadores.
Enseguida veras la entrada a la caverna que tiene una profundidad de aproximadamente 10 metros, como la mayoría de los cenotes cuenta con un enorme álamo, que justo a su lado se encuentran las escaleras de madera que te llevaran en primer lugar a dos plataformas por si desea tirarte unos clavados, a continuación, descenderás por unas escaleras de metal, deberás tener mucho cuidado ya que el lugar es estrecho, estas mismas te conducirán directamente al agua.
Sin lugar a duda el pequeño cenote es hermoso, sus aguas cristalinas de tonos azules contrastan perfectamente con el fondo en tono blanco, no es muy profundo a pena tiene 6 metros, pero como se encuentra rodeado con muros de piedra es complicado buscar un espacio en donde descansar o aguardar mientras la salida no este ocupada.
Por sus pequeñas dimensiones no puede recibir un gran número de gente al mismo tiempo, por lo que te recomendamos visitarla lo más temprano posible para evitar la aglomeración y poder disfrutarla de forma privada.