La estructura principal se conoce como “El templo de las 7 muñecas” o “Templo del Sol”, que es una subestructura cuadrangular de lo que alguna vez fue un templo monumental, el edificio debe su nombre a una ofrenda de siete muñecos burdos de barro, que se encontraron en su interior.
Esta construcción es de planta cuadrangular, con una cámara central rodeada por un corredor. Su techo formaba una torre proyectada por encima del edificio.
Presenta cuatro accesos y una ventana a cada lado de sus entradas, al poniente y al oriente, lo que da el carácter de observatorio astronómico construido sobre basamento piramidal de esquinas inclinadas, con escaleras de acceso por su cuatro lados.
El friso del edificio estuvo decorado con ocho mascarones estucados sobre una base de piedra tallada y dos serpientes entrelazadas y glifos, cuentas, plumas y animales marinos en estuco modelado. Hacia 800 d.c fue rellenado con piedras y tapado con la construcción de otro edificio mayor, cutos restos lo cubren aun en parte.
El Equinoccio en el Templo de las 7 Muñecas
En el que se puede observar un fenómeno solar, en donde el dios maya del sol asoma su plumaje de fuego por las puertas del majestuoso templo durante los primeros días de primavera, y de otoño, debido a la impresionante precisión matemática de los mayas. Espectáculo digno de admirar para comprender la perfección de la sabiduría de esta civilización.